La belleza de lo imperfecto

En una ocasión me encontraba posteando un detalle que me sucedió con uno de mis relojes en grupos de relojes en Facebook. A decir verdad, era un detalle insignificante que no afectaba para nada el funcionamiento de mi mecanismo. 

Recibí una diversidad de comentarios, algunos eran sugerencias y otros tantos eran malos comentarios, pero entre tanta conversación surgió un post que decía: “Te falta mucho wabi sabi a ti”. A lo que me desconcertaron las palabras de este usuario y me di a la tarea de investigar que era el “Wabi Sabi”. 

Por esta razón quiero compartir las 3 ideas básicas del Wabi Sabi:

1. Nada es perfecto.

2. Nada es permanente.

3. Nada está completo.

El “Wabi Sabi” es una cultura japonesa. Se basa en la idea de encontrar lo bello en la imperfección. “Wabi” deriva de la raíz wa: referente a la armonía, la paz, la tranquilidad y el equilibrio; “Sabi”: significa “flor del tiempo”, hace referencia a la progresión natural del tiempo, la decadencia, la degradación y el brillo apagado de lo que una vez fue resplandeciente. 

Es una filosofía basada en la contemplación de la naturaleza y la aceptación de su ciclo de vida: nacimiento, crecimiento, decadencia y muerte.

Al leer esta definición pasó por mi mente: «¡Imagina que pudiéramos hacer lo mismo con nosotros!». 

Sería la vacuna perfecta para matar a todo tipo de perfección supuesta por el hombre, considero yo. Hoy en día, la sociedad genera representaciones sociales para clasificar algo o a alguien en donde prácticamente todo lo quiere perfecto, sin error, fallas ni detalles. Por ejemplo, muchas personas dicen “¡Ay! Mi cuerpo perfecto sería…” y completan la frase con diferentes características, de modo que se ha vuelto algo tan común alrededor que el cuerpo perfecto sería el que mencionan. Incluso hay mucha gente que se deprime y baja su autoestima por no conseguir ese “cuerpo perfecto” que desea. 

Lo mismo sucede con la estética, la belleza. “Es que yo quiero estar igual de bella y hermosa que… (tal celebridad)”, por poner un ejemplo. Se cree que se nace y se muere bella, ciertamente no. Conocemos de antemano que todo en este mundo, al igual que la cultura Wabi Sabi, cumple un ciclo de vida. Llega un momento en el que algo se vuelve obsoleto, inservible.

No está de más tener algo de Wabi Sabi, buscar lo sencillo, la armonía, una paz interior en donde uno se siente a gusto consigo mismo, es feliz y vive feliz. ¿Por qué buscar lo perfecto en algo que no existe? Sin embargo, el hombre sigue atado a buscar que todo sea perfecto. Cuando lo único perfecto que existe, es Dios. 

Se trata encontrar la felicidad y serlo mediante las cosas sencillas, donde se sabe que hay imperfecciones, buscar esa autenticidad por encima de todo en donde sabemos que se irá cumpliendo el ciclo de vida: se nace, crece, decae o se degrada, y finalmente muere.

Es una idea diferente a nuestra cultura latinoamericana formada por ideales griegos basados en la simetría y las proporciones perfectas.

¡Ojalá pudiéramos hacer igual con nosotros mismos! 

~ JAG